martes, diciembre 09, 2008







Hay despedidas

secas como higos con espinas,

no nos hacen llorar

aunque nos duelen


caudalosas, como multitudes de gente

trashumante que se suicida por las ventanas

de nuestros ojos


ligeras,

moronas de pan en los andenes

no dejan rastro en las barrigas

de los pájaros


otras, cotidianas,

como el simple adiós al levantar la mano

tienen el poder de hacer girar los cuerpos

y que nos den la espalda


También hay de otras,

orgullosas,

como monumentos estoicos en los parques

los perros los orinan

las palomas los ensucian

la gente los olvida

y no los llora nadie


Sin excepción, todas,

evitan la gangrena de las cosas

son una herida abierta

en un pedazo de la carne

para que fluya la sangre


martes, diciembre 02, 2008























Ciencia o alquimia


Dicen quienes saben, que

el saber no sabe, que

el no saber hace al sabio, que

quien no sabe siempre mira


que cuando mira, siempre

se pregunta, que

por cada respuesta encontrada,

aparecen otras diez


que ir tras el saber, es

rodar por un laberinto, jalar

la punta de la lana, enredar

el ovillo, no tejer con él


que dos más dos

son cinco, que el todo es más

que las partes, que cada parte

es el todo, que el ahora

acaba de irse, el mañana

aún no existe, que el ayer

ya pasó.


Eso dicen los que saben, que

no saben de lo que hablan.


***


El conocimiento,

-sin reversa posible-

como el desborde de un líquido

mancha de rojo cuanto toca

derrumba las copas

que esconden a una guerra

enciende la piel de los penosos

corta con su nariz afilada

los relojes

hace

sin que nadie se dé cuenta

un temblor de tierra

con un silencio tal

de frío

súbito

que transforma

sin misericordia lo que somos

-hace del barro a un hombre-

trasmutando el material


lunes, diciembre 01, 2008

sábado, noviembre 29, 2008

La paz
dúctil
arde,
después
lo horrible










La flor carnívora come carne

luego, llora sangre

jueves, noviembre 27, 2008

Me fui kilómetros afuera

lejos de ti

muy lejos de la patria

donde se rompió el tejido

leve delicado como piel de niño

con que habíamos trenzado

el cuenco del abrigo.


Me fui kilómetros afuera

y no he vuelto.

Mis piernas estropeadas por minas quiebrapatas

locales, extranjeras,

no saben cómo construir el camino de regreso


La ira, el dolor, el resentimiento

larva de mariposa del infierno,

han anidado en mis muñones,

mis sienes y mi corazón


Vengo de a pocos

Camino sobre las manos

sin opciones de caricia

lenta

lenta

torpe- mente

maltratada


Necesito ponerme de nuevo el tejido

leve de niño hecho de piel

sobre el cuerpo

y así sanar


y así volver